Transparencia Internacional ha editado la Guía práctica de autodiagnóstico y reporting en compliance, buen gobierno corporativo y prevención de la corrupción que pretende convertirse en un eficaz instrumento para la empresa en la tarea del establecimiento de unos criterios de mejora continua y verificación de sus programas de Compliance. Tal y como propone la propia guía, lo deseable es que sean los jurídicos responsables de Compliance quienes se encarguen de la tarea de aplicar los baremos de esta guía, debido al elevado carácter técnico de los indicadores.
La guía abarca una metodología para orientar y asistir a la empresa en el diagnóstico y fortalecimiento de las políticas de cumplimiento en las áreas de:
- Cumplimiento normativo.
- Gobierno corporativo.
- Prevención de la corrupción.
- Reporting público país por país (Aquel al que están obligados anualmente las grandes multinacionales y en el que desglosan a las autoridades tributarias locales las ganancias, ingresos, impuestos pagados y causados, empleados, capital, ganancias retenidas, activos tangibles y actividades de negocio).
El chequeo de estas cuatro cuestiones permitirá a la empresa valorar su desempeño, cuantificar su evolución y mostrar sus esfuerzos hacia una gestión tranparente de la misma.
En torno a las cuatro grandes áreas anteriormente indicadas, se establecen una serie de indicadores de cumplimiento normativo obligatorio, voluntario y recomendados. En total son 273, de los cuales 144 son de autodiagnóstico y 129 de reporting.
Tras el diagnóstico la empresa conoce en qué nivel de cumplimiento está –moderado, medio, máximo- y en función de ello puede obtener una información clara y precisa sobre la calidad de prevención de su nivel de corrupción, buen gobierno corporativo, transparencia y compliance.
Aunque los destinatarios son las grandes empresas cotizadas, la guía es igualmente valiosa para empresas no cotizadas y pequeñas y medianas empresas, en la medida proporcional a sus necesidades. No hay que olvidar que las obligaciones de cumplimiento normativo relativas a los riesgos penales no obedecen al tamaño de la empresa sino a los riesgos propios derivados de la actividad la que se dedica la empresa.
En el contexto actual gobernado por cambios constantes que generan gran inseguridad jurídica, la guía práctica editada por Transparencia Internacional puede resultar muy útil. Esta organización es la única ONG dedicada a combatir la corrupción a nivel mundial, congregando a la sociedad civil, sector privado y los gobiernos en una amplia coalición global.
